El Bálsamo limpiador facial My Moment, a la venta en Mercadona, se ha ganado ya el aplauso de los clientes más exigentes gracias a su textura y sus excelentes resultados, que están a la altura de productos para el cuidado de la piel de primeras marcas. La Perfumería de Mercadona acoge cada temporada algunos de los cosméticos low cost favoritos de las expertas en belleza. Y es que la cadena valenciana de supermercados avanza cada vez más con innovadores productos y formulaciones eficaces y seguras que aportan valor al usuario y que alcanzan el éxito nada más llegar al lineal. El lanzamiento más buscado del momento es el Bálsamo limpiador facial My Moment, una fórmula excepcional que limpia en profundidad y retira el maquillaje –incluso el waterproof–, dejando una piel radiante, suave y luminosa hasta 12 horas después de su aplicación. ¿La clave del éxito? Su textura, que supone una verdadera experiencia sensorial cada vez que se usa el producto. No es ni líquida ni aceitosa y su consistencia cambia fundiéndose al entrar en contacto con la piel. Esta novedad y su combinación de aceites esenciales aromáticos ha conquistado a las usuarias porque limpia en profundidad el rostro sin resecar ni descamar, elimina restos de suciedad, reduce el tamaño de los poros y de los puntos negros, elimina toxinas y calma e hidrata la piel. Lo mismo se consigue, según las “Mercadona lovers”, con otros bálsamos de primeras marcas cosméticas que han logrado posicionarse como los desmaquilladores más icónicos del mundo. Sin embargo, mientras estos se venden por un precio que ronda los 80 euros, la propuesta de la cadena de supermercados solo cuesta 11,50 euros, una importante diferencia de coste que tiene que ver con el volumen de producto que saca a la venta Mercadona. |
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| Fórmula vegana y sostenible |
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El Bálsamo limpiador facial My Moment contiene aceites esenciales de eucalipto, clavo, camomila y manteca de karité, una fórmula exclusiva que consigue suavizar la dermis y llenarla de luminosidad tras liberarla de los restos de maquillaje y suciedad . El aceite esencial de eucalipto tiene un gran poder antimicrobiano. Asimismo, rebaja la inflamación, inhibe el edema y reduce la permeabilidad vascular estimulando la microcirculación. Actúa también como un poderoso antioxidante, reduciendo los daños que pueden causar las agresiones externas y favoreciendo la cicatrización. El aceite esencial de clavo, por su parte, posee excelentes propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y purificantes para la piel. La camomila es antiinflamatoria, antiséptica y reduce el eritema provocado por la exposición solar. La manteca de karité actúa como un emoliente y reparador de la barrera cutánea y posee propiedades regenerativas y altamente nutritivas. |
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Muselina de algodón egipcio para eliminar impurezas y células muertas |
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Las muselinas de limpieza para el rostro son una de las grandes tendencias cosméticas del momento que tiene su origen en la técnica japonesa de doble limpieza. Se trata de una tela de algodón suave y ligera que ayuda a sacar el máximo partido a los bálsamos limpiadores y a los exfoliantes, ayudando a eliminar la suciedad, las impurezas, las células muertas y el maquillaje sobrante. El Bálsamo limpiador facial se vende acompañado por una exquisita muselina elaborada con algodón egipcio 100% con la que obtendremos una suave exfoliación estimulando la microcirculación. Esta muselina es lavable y reutilizable, por lo que podremos seguir usándola cuando se acabe el bálsamo con otros productos e incluso con agua, lo que nos permitirá llevar a cabo una limpieza facial sin residuos, con un efecto positivo para el medio ambiente. |
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Así debes incluir el Bálsamo facial y la muselina en tu rutina |
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El Bálsamo limpiador facial My Moment es un producto recomendando para utilizar tanto de día como de noche, y quienes poseen de tiempo suficiente para centrarse en su rutina facial pueden hacer la limpieza incluso dos veces al día. Su uso es muy sencillo: - Tomar con la espátula una pequeña cantidad de producto y aplicar en rostro, cuello y escote. Extender con movimientos circulares hasta emulsionar la fórmula y fundir el maquillaje y las impurezas.
- Sumergir el paño de muselina en agua caliente, escurrir y aplicar sobre el rostro y el cuello. El calor ayudará a abrir los poros, mientras que los aceites se activarán para eliminar las toxinas.
- Pasados unos segundos, usar la muselina para arrastrar todo rastro de maquillaje y de producto.
- Volver a aclarar la muselina con agua fría y aplicar en rostro y cuello unos 5 segundos para cerrar el poro.
- Secar la piel con una toalla mediante pequeños toques.
** Se recomienda lavar la muselina tras cada uso con jabón de glicerina y dejar secar al aire para una mejor conservación. |
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