Tal como se muestra en el vídeo, la falla generó todo un aluvión de reacciones de empatía hacia los delfines y de rechazo a la explotación que estos sufren en cautividad. “Al ver la falla empezamos como a recapacitar… Llegamos a la entrada, íbamos a comprar, pero igual fue fuerte…”, cuenta un turista. “No he entrado al Oceanogràfic por esto”, confiesa otra turista. El monumento suscitó además sentimientos de tristeza al imaginarse en una situación así: “me querría morir, por qué no lo soportaría” e indignación: “nos parece un absurdo lo que hacen aquí con los delfines en cautiverio'. En torno a la falla activistas de World Animal protection España y Valencia Animal Save exigieron a través de un manifiesto al Oceanogràfic que indulte a los 18 delfines cautivos que tiene encerrados, obligados a actuar en espectáculos a diario. World Animal Protection, que trabaja para acabar con la explotación de animales salvajes con fines de entretenimiento, ha alcanzado ya más de 70.800 firmas en su petición para exigir al Oceanogràfic que deje de utilizar a los delfines. España encabeza la lista de países con más delfines sufriendo en cautiverio de Europa, con un total de 93. Un 20% de estos se encuentran encarcelados en el Oceanogràfic, siendo así el centro con más delfines encerrados de España, según un ranking que World Animal Protection publicó el pasado junio. |
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