▷ Tercera guerra Mundial: La Próxima la Lucha por la Comida y el Agua

Ya, el actual Teatro de Operaciones carece de cualquier relevancia, toda vez que Moscú, hace aprestos desde el mes pasado, para desminar toda la geografía agropecuaria ucraniana para que, sean sus propios tractoristas, los que,

se harán cargo de aquí en más de toda el área cultivable y cosechable en la inmensa zona ya capturada a Kiev.

Sin embargo, los reveses climatológicos de sequía extrema que, constituyen un padecimiento común a todo el planeta y que, para suerte, del sector Escandinavo y las naciones Eslavas no ha impactado allí, como en el resto del continente -España en lo particular-, determinará a comienzos del venidero invierno, una nueva modalidad en este conflicto, aún, y por escaso tiempo, no internacionalizado.

Que consistirá, si le adicionamos, la escasez de combustibles que sufrirá Occidente, por esa suerte de un tan absurdo auto embargo, la inevitable necesidad de importar la comida genérica.

Y, es recién ahora que, apenas estoy cayendo en la cuenta del porqué la otra topo de Putin -Lagarde-, ordenó la presurosa impresión de ocho trillones de euros.

Toda vez que, merced a ello, -siempre que, ese diluvio de circulación monetaria no haga desplomar inmediatamente su cotización -lo que mucho me temo, será inexorable-, le servirá a esa Unión para, cuanto menos, en lo que resta del año en curso, lograr antes del desplome, abonar dichas vitales importaciones.

Lo que, palabras más o menos, no será nada diferente al abandono de esa moneda común y su inmediata secuela, esto es, en 2023: "sálvese quien pueda".

Y, entre otros vectores, igualmente mortíferos, en ello consiste la carta de triunfo del eje Beijing-Moscú que, con el más que, inevitable e inminente derrumbe de Wall Street, la imposición del rublo como nuevo patrón monetario con vigencia en toda Europa -Este y Oeste-, África Subsahariana, muy posiblemente Brasil y el resto de América Latina.

Reservándose Xi Jinping, la misma política macro circulatoria respecto de Asia, incluyendo particularmente al área de la gran Indochina, el Golfo Arábigo y, con ello, un desarrollo meteórico de los Nuevos Amos, en sus industrias, estrictamente vinculadas en todo lo atinente a la desalinización de aguas oceánicas.

Y sobre este ítem, es altisimamente probable que, Chile -en vía directa a su absoluta desertificación-, tanto como Bolivia y el noreste de Argentina, reciban los beneficios de esas mismas mega inversiones, merced a la riqueza concéntrica del litio en concepto de contraprestación.

Sin embargo, para enorme sorpresa e incredulidad de muchos, por no decir de todos, estos nuevos y Universales Colosos, de una forma que, la historia en este lapso venidero por redactarse la juzgará como inédita, todos los actuales gobernantes de esas tres Republiquetas sin Plátanos -entre las que infortunadamente se encolumna mi Patria-, recibirán los tan imperativos castigos y -hago votos- que incluyan ejecuciones sumarias .

Los cuales serán reemplazados por otros -Militares- que, en virtud a las normativas de esta suerte de Nuevo Mundo, no serán etiquetados como filo marxistas ni mucho menos que eso.

Si no que, serán promovidos con caracteres y del todo autocráticos, desbaratando así a los Díaz Canel, Ortega, Maduro, Arce, Borich, Castillo, Fernández de Kirchner y, el resto de esa resaca moral que disgusta del vivir y que, son de la peregrina y naif idea que estos nuevos vientos los favorecerán.

Porque en esencia estas lacras son de la opinión que, podrán y con exultancia, asimilar ese utópico y gangsteril socialismo del siglo XXI, a los planes de este neo eje pekines/moscovita que, precisamente, se deshará de todas estas ratas de albañal.

Por cuanto, para la materialización exitosa de su hegemonía y expansionismo, necesitarán exterminar el lavado de activos y todo lo demás que se encuentre contaminado de cualquiera forma de corruptelas y, en las que desde el primero hasta el último se encuentran estrechamente asociados.

Hoy, son muy pocos, los que, se encuentran aptos para absorber cambios tan magistrales, porque para lograrlo, deberán desarroparse de una forma de ser que, nos dirige desde los albores de las ficticias gestas independentistas de hace más de doscientos años.

Desde ahora y en todo el Orbe, el precepto que hará de regla, será la practicidad no ideológica que está germinando, tan veloz y coetáneamente como la decadencia del dólar y esta USA que, implicará necesariamente la caída mundial del consumo de enervantes; tal vez tanto como las criptomonedas que, vengo pronosticando desde hace más de un año.

Opinión por: Carlos Belgrano.

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