En una reciente sentencia, un tribunal respaldó a una paciente de Alicante que sufrió consecuencias graves debido a una mala praxis durante un trasplante de riñón realizado en el Hospital General. La Conselleria de Sanidad deberá indemnizar a la mujer con 25.000 euros, reconociendo así la responsabilidad en las secuelas provocadas por la intervención quirúrgica. Este artículo profundizará en los detalles del caso, las consecuencias para la paciente y el proceso legal que culminó en esta decisión.
Secuelas de la Mala Praxis:
La intervención quirúrgica, llevada a cabo el 25 de agosto en el Hospital General de Alicante, resultó en graves secuelas para la paciente. Una parálisis del miembro inferior derecho, derivada de una lesión en el nervio femoral, y una pérdida significativa de axones funcionales del 60% en el nervio ciático, son los resultados desafortunados de la operación. La sentencia detalla doce puntos de secuelas por lesión incompleta del nervio femoral, nueve días de perjuicio personal particular grave y 266 días de perjuicio personal particular moderado.
Proceso Legal y Sentencia:
Ante el silencio administrativo tras la reclamación judicial de la paciente, esta decidió interponer un recurso a través de la firma Le Morne Brabant Abogados. El tribunal, al evaluar el caso, determinó que la Administración debía asumir la responsabilidad y condenó a indemnizar a la recurrente con la cantidad de 25.598,93 euros. Este monto corresponde a los perjuicios sufridos, que la paciente no tenía el deber jurídico de soportar, y se incrementa con los correspondientes intereses desde la fecha de la reclamación presentada en la vía administrativa.
Secuelas y Perjuicios:
Tipo de Secuela | Puntos | Días de Perjuicio Personal |
---|---|---|
Lesión Incompleta del Nervio Femoral | 12 | – |
Perjuicio Personal Particular Grave | – | 9 días |
Perjuicio Personal Particular Moderado | – | 266 días |
Implicaciones del Fallo: La decisión del tribunal tiene implicaciones significativas tanto para la paciente como para la Administración de Sanidad. Este fallo establece un precedente importante al reconocer la responsabilidad de la institución en casos de mala praxis médica, promoviendo así la rendición de cuentas y la transparencia en los servicios de salud.