
Hippies de la Explanada en Alicante: el ayuntamiento les deja sin sitio

Karim Sardi es una figura emblemática en el mercadillo artesanal de la Explanada de Alicante. Su historia se entrelaza con la de este icónico lugar, donde prácticamente nació, siendo hijo de uno de los primeros hippies que se establecieron en este pintoresco rincón de la ciudad.
La caseta de la familia de Karim ha sido testigo de décadas de historia, de intercambios culturales y de coloridas artesanías que han deleitado a locales y turistas por igual. Sin embargo, un duro golpe ha caído sobre este enclave único: el Ayuntamiento ha ordenado el cierre definitivo del mercadillo el próximo día 31.
Para Karim Sardi y sus colegas, este anuncio ha sido devastador. Tras años de dedicación y pasión por su labor, se encuentran en una encrucijada sin solución a la vista. La incertidumbre y la nostalgia se apoderan de ellos al no tener un plan b, al no contar con un nuevo espacio donde desplegar sus creaciones y recuerdos de Alicante.
- El legado de los hippies, de las pulseras artesanales y los recuerdos únicos, parece estar en peligro de desvanecerse en el mosaico ondulante de colores de la Explanada.
- La incertidumbre sobre el futuro de este mercado tan arraigado en la identidad de la ciudad deja a Karim Sardi y a sus compañeros con un sentimiento de pérdida y desamparo.
- La falta de una nueva ubicación para las casetas representa el fin de una era, de una tradición familiar y cultural que ha marcado la vida de generaciones en Alicante.
El silencio que pronto reinará en el lugar que ha sido su hogar durante tanto tiempo es un recordatorio amargo de que, a veces, el progreso y la modernización pueden llevarse consigo tesoros invaluables.
- El traslado del mercadillo: una historia de incertidumbre y desencuentros
- La postura de los hippies ante la situación
- Conflicto de los hippies por la permanencia de sus puestos en la Explanada
- Transformación urbana en Alicante: el conflicto del mercadillo
- El testimonio de Verónica Labrador: la lucha de una emprendedora en tiempos de incertidumbre
El traslado del mercadillo: una historia de incertidumbre y desencuentros
La historia de Lucía Ramello, portavoz de la Asociación de Vendedores de la Explanada, es una crónica marcada por la incertidumbre y los desencuentros. Todo comenzó en enero de 2020, cuando el desmantelamiento del mercadillo dio sus primeros pasos. Según Ramello, todo empezó a raíz de una queja vecinal que llegó hasta la junta de distrito 1. Fue allí donde se tomó la decisión de suprimir los puestos y trasladarlos al aparcamiento del Postiguet, en el Paseo de Gómiz, a tan solo 100 metros de su ubicación original.
Lo curioso es que, según cuenta Ramello, la queja de la que nunca se conoció el motivo, salió a la luz dos años más tarde, en julio de 2022. En reuniones posteriores con el entonces concejal de Ocupación de Vía Pública, Manuel Jiménez, se les prometió a los vendedores una nueva ubicación en la playa con una concesión de 15 años. Sin embargo, en el Pleno municipal de marzo de 2023, el consistorio votó a favor del traslado y la supresión de los puestos, pero, como lamenta Ramello, solo consta en acta la supresión.
La sensación de engaño se apoderó de los vendedores. Meses más tarde, la sucesora de Jiménez, Cristina Cutanda, les comunicó que desconocía por completo el tema del traslado y denegó la ubicación en el Paseo de Gómiz. En cambio, propuso a los vendedores que presentaran alternativas para resolver la situación.
Lecciones aprendidas y desafíos por delante
- Comunicación transparente: La importancia de una comunicación clara y transparente entre las autoridades y los ciudadanos es crucial para evitar malentendidos y conflictos.
- Defensa de los derechos: Los vendedores de la Explanada han demostrado su determinación en la defensa de sus derechos y su espacio de trabajo.
- Colaboración y búsqueda de soluciones: Ante los obstáculos, es fundamental la colaboración entre todas las partes involucradas para encontrar soluciones que satisfagan a ambas partes.
La Asociación de Vendedores de la Explanada de Alicante ha protagonizado una protesta el 19 de enero de 2025, planteando diversas propuestas en su lucha por encontrar un espacio adecuado para desarrollar su actividad de forma legal. Los integrantes de esta asociación, conocidos como hippies, proponen diferentes ubicaciones en suelo municipal, preferiblemente en zonas céntricas con afluencia de alicantinos y turistas.
La postura de los hippies ante la situación
La portavoz de la asociación ha manifestado su disposición a colaborar, ofreciéndose a cambiar de ubicación, abonar tasas adicionales e incluso trasladarse a donde se les indique. Sin embargo, se han encontrado con la negativa del Ayuntamiento, liderado por el PP con mayoría simple, que parece no incluirlos en sus planes para Alicante.
Las alternativas propuestas
En medio de esta controversia, el consistorio ha sugerido dos opciones adicionales: la zona del Cocó y el espigón del hotel Meliá, ambos pertenecientes al dominio marítimo terrestre de Costas. Ante esta propuesta, el Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha remitido a la ley de Costas, dejando en manos del ayuntamiento la solicitud de autorización necesaria para ocupar dichos espacios. Sin embargo, este trámite nunca llega a concretarse, según Ramello, representante de los vendedores.
Conflicto de los hippies por la permanencia de sus puestos en la Explanada
El mes pasado, el Pleno municipal estableció la última prórroga para los puestos de los hippies en la Explanada, la cual concluye este viernes. Sin embargo, un mes después, la incertidumbre continúa entre los vendedores. La portavoz de los hippies expresa su frustración al sentir que les están "vendiendo humo" al proponerles una ubicación entre la Lonja del Pescado y un parque infantil, cerca de la Explanada.
En un intento por encontrar una solución, los hippies llegaron a extender cintas en el suelo para simular el espacio de las casetas, pero se dieron cuenta de que no tenían suficiente espacio. Un estudio técnico financiado por ellos mismos demostró que el emplazamiento propuesto no es viable. A pesar de esta evidencia, el consistorio parece desentenderse del problema, recordándoles que necesitan solicitar permiso para que circulen camiones por la Explanada y desmontar las casetas.
Los vendedores, respaldados por una autorización de 15 años vigente desde 2012 que les permite estar hasta el 2026, decidieron tomar medidas legales. Solicitaron la suspensión cautelar del desmantelamiento de los puestos ante un juzgado de lo Contencioso Administrativo. Sin embargo, la semana pasada, el juez denegó la moratoria basándose en el pleno de marzo de 2023, que no había sido impugnado.
Puntos clave del conflicto:
- Prórroga: La última prórroga para los puestos de los hippies en la Explanada finaliza este viernes.
- Ubicación propuesta: Entre la Lonja del Pescado y un parque infantil, en las inmediaciones de la Explanada.
- Estudio técnico: Demostró que la ubicación propuesta no es viable para los vendedores.
- Acción legal: Los hippies pidieron la suspensión cautelar del desmantelamiento de los puestos en un juzgado de lo Contencioso Administrativo.
- Decisión judicial: El juez denegó la moratoria basándose en el pleno de marzo de 2023, que no fue impugnado.
Transformación urbana en Alicante: el conflicto del mercadillo
Las autoridades locales de Alicante han justificado la eliminación del mercadillo como parte de un ambicioso proyecto de transformación urbana en el centro de la ciudad. Este plan incluye la expansión de zonas peatonales y la recuperación de espacios públicos, como la emblemática Explanada. Sin embargo, los vendedores se han mostrado en desacuerdo con esta decisión, argumentando que prefieren permanecer en el Paseo de Gómiz, a pesar de las implicaciones que esto conllevaría.
Impacto en los vendedores locales
Los comerciantes afectados por esta medida lamentan la situación, expresando su deseo de continuar con sus actividades comerciales. Juanita Esteban, propietaria del puesto 13 desde 1979, se encuentra entre ellos. Con una larga trayectoria vendiendo ropa de ganchillo, anillos y pulseras, se ve obligada a postergar su jubilación hasta saldar su vivienda. La decisión de cierre no solo repercute en su vida personal, sino que también afecta a otras 60 familias que dependen de los ingresos generados en el mercadillo.
Otro ejemplo es el de Cristina Muenala, cuyo puesto de artesanía ecuatoriana ha sido su fuente de ingresos para saldar la deuda de 10.000 euros por la caseta. En una situación similar se encuentra John, quien tuvo que hipotecar su casa para adquirir su puesto. La incertidumbre sobre su futuro laboral se cierne sobre ellos, ya que el mercadillo representa una fuente de sustento vital para sus familias en tiempos de dificultad económica.
La diversidad de comerciantes, como Umer Nadeem, un pakistaní que se unió al mercadillo en 2021, demuestra la importancia de estos espacios para comunidades diversas que buscan generar ingresos suficientes para mantener a sus seres queridos. El aumento de los costos de vida y de los alquileres de viviendas agrava la situación, convirtiendo la incertidumbre en una constante en la vida de estos vendedores locales.
El testimonio de Verónica Labrador: la lucha de una emprendedora en tiempos de incertidumbre
La historia de Verónica Labrador, una emprendedora burgalesa de 37 años, refleja la valentía y la determinación de aquellos que deciden apostar por sus sueños a pesar de los obstáculos. Con más de dos décadas en Alicante, Verónica adquirió el puesto número 25 en febrero de 2024, con la ilusión de llevar su negocio a la playa. Sin embargo, la realidad ha resultado ser más compleja de lo que esperaba.
“En ese momento, se suponía que nos íbamos a trasladar a la playa”, recuerda Verónica. Llenó su caseta con mercancía que reflejaba su esencia: velas y jabones artesanales, joyería única y dibujos para estampación de camisetas. Pero la promesa de cambio se ha desvanecido, dejándola frente a un futuro incierto que ha puesto en pausa sus planes de expansión.
Un futuro lleno de desafíos
Verónica Labrador, como muchos emprendedores, ha enfrentado momentos difíciles en su trayectoria. En 2008, decidió irse a Inglaterra en busca de oportunidades laborales que no encontraba en su tierra natal. Ahora, con la esperanza de construir una estabilidad que le permita apoyar a sus padres, se ve amenazada por el cierre de su negocio.
“Tengo proyectos para la caseta, como una web para ventas online”, comparte Verónica, evidenciando su espíritu innovador y su voluntad de adaptarse a los nuevos tiempos. Sin embargo, la incertidumbre actual ha puesto en pausa sus planes, generando un ambiente de inseguridad que pone en riesgo su futuro y el de su familia.
El desafío de encontrar soluciones
Ante la posibilidad de tener que emigrar nuevamente en busca de nuevas oportunidades, Verónica se enfrenta a una encrucijada que pone a prueba su determinación y su capacidad de resiliencia. Con padres que dependen de ella, el cierre de su negocio representaría no solo la pérdida de una fuente de ingresos, sino también la ruptura de un sueño largamente acariciado.
La historia de Verónica Labrador nos recuerda que el camino del emprendimiento está lleno de desafíos, pero también de oportunidades para crecer y reinventarse. En tiempos de incertidumbre, es crucial mantener la esperanza viva y buscar soluciones creativas que nos permitan superar las adversidades con determinación y coraje.
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