En un golpe significativo contra el tráfico de drogas, la Policía Local de Alicante ha detenido a tres conductores de un autobús que se dirigía desde Roquetas de Mar (Almería) a Rumanía. En un sorprendente descubrimiento, las autoridades encontraron 56,2 kilos de hachís y marihuana escondidos en dos grandes mochilas. El arresto fue posible gracias al agudo olfato del perro policía Kata, que detectó la presencia de droga en el equipaje. Este artículo profundizará en los detalles del arresto y las investigaciones en curso.
El Descubrimiento Impactante
El domingo por la mañana, durante una operación rutinaria de seguridad en la estación de autobuses de Alicante, los agentes se encontraron con un autobús de matrícula rumana estacionado en el andén 12. Fue en este momento cuando el perro policía Kata identificó la presencia de drogas en el maletero del vehículo. Al abrir dos maletas-mochila, encontraron un total de 22 sacos de hachís y marihuana, con un peso combinado de 56,2 kilos.
Detalles del Cargamento y las Perplejidades de los Conductores
Los sacos decomisados consistían en 11 sacos de hachís, pesando 40,4 kilos, y otros 11 de marihuana, con un peso de 15,8 kilogramos. Los tres conductores, también de origen rumano, afirmaron no tener conocimiento sobre el origen o la propiedad del equipaje. Sin embargo, uno de ellos llevaba una carpeta con nombres y números de teléfono de personas que supuestamente iban a recoger el cargamento en Rumanía. Este hombre explicó que un desconocido había introducido las mochilas en el autobús en Roquetas de Mar, Almería, a las 4:30 de la madrugada.
Las Implicaciones y las Investigaciones en Curso
El descubrimiento de este importante cargamento de drogas ha llevado a la desarticulación de una red de tráfico de estupefacientes que operaba entre Almería y Rumanía. Las autoridades están llevando a cabo investigaciones exhaustivas para identificar a los demás involucrados en esta operación ilegal y para desentrañar la complejidad de la red de distribución.
