Desde lo que se denominó como un «intento violento de asalto» hasta «circunstancias muy concretas de unos pocos», el Ayuntamiento de Alicante ha logrado rebajar la tensión con los bomberos luego de las fuertes protestas durante el pleno municipal de marzo. El alcalde de la ciudad, Luis Barcala, ha confirmado que el expediente disciplinario inicial se ha reducido a uno de carácter «informativo», minimizando la importancia de las protestas que desencadenaron una enérgica respuesta por parte de su gobierno.
Barcala ha enfatizado que las acciones de un grupo reducido no representan a la plantilla en su totalidad, ni condicionan el desarrollo de las negociaciones en curso con los sindicatos. Las conversaciones se están llevando a cabo con un enfoque colaborativo, buscando alcanzar acuerdos dentro de las posibilidades existentes. El alcalde ha expresado su satisfacción por el espíritu de progreso que se ha mantenido en las negociaciones y por la disposición de ambas partes para llegar a acuerdos beneficiosos para todos.
En Alicante, las reivindicaciones planteadas recientemente han despertado un debate entre el equipo de gobierno municipal y los Bomberos de la ciudad. Mientras el regidor popular considera que estas demandas son muy pertinentes y merecen ser atendidas, la Plataforma de Bomberos del Ayuntamiento de Alicante, un grupo independiente de los sindicatos, no comparte esta Opinión y ha expresado su descontento.
Descontento de los Bomberos
La Plataforma de Bomberos ha emitido un comunicado en el que señala que el Concejal de Seguridad Ciudadana, Julio Calero, no ha cumplido con el primer compromiso que había anunciado oficialmente. En concreto, se había comprometido a entregar tres nuevos vehículos antes del 30 de abril de 2025, un acuerdo que, según la Plataforma, no se ha cumplido.
Alerta de incumplimientos
Este desacuerdo ha generado tensiones, ya que la Plataforma de Bomberos ha advertido sobre las primeras promesas incumplidas por parte del ejecutivo local, a pesar de los acuerdos alcanzados con los sindicatos. Esta situación pone de manifiesto una discrepancia importante entre ambas partes, lo que refleja un escenario de descontento y falta de consenso en cuanto a las mejoras necesarias para el cuerpo de Bomberos de Alicante.
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